Entre el blockchain y la realidad: Basado en el blockchain de Ethereum, el protocolo creado en 2017 permite almacenar y transmitir información del mundo real de forma segura y descentralizada. El objetivo es conectar los datos del mundo real con los contratos inteligentes incrustados directamente en la blockchain de Ethereum para simplificar las transacciones entre los usuarios. La tecnología consiste en una red de oráculos que permite introducir datos fiables del mundo real directamente en los contratos inteligentes para su uso en diversas aplicaciones descentralizadas. Por ejemplo, podría permitir la integración de los datos meteorológicos de determinadas zonas geográficas para ejecutar pólizas de seguros.

Características:

El protocolo tiene su propio token: LINK. El token se utiliza, como en el caso de muchos criptoactivos, para pagar los costes de funcionamiento de la red. Los oráculos se utilizan para autentificar la veracidad de los datos proporcionados. Los datos pueden ser, por ejemplo, la temperatura exterior, el resultado de un partido de fútbol, el resultado de una votación, una estadística económica, etc. Todos estos datos se comprobarán con diferentes fuentes para garantizar su autenticidad. Así, Chainlink conecta el mundo "on-chain" (en la cadena de bloques) y el mundo "off-chain" (información fuera de la cadena de bloques).

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